Depresión y falta de motivación
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¿Qué entendemos por depresión en niños y adolescentes?
Aunque nos cueste pensarlo, los niños están tristes con frecuencia. Están sometidos a muchos cambios y pérdidas (clase, amigos, mascotas, etc) en un momento en el que todavía no han desarrollado la capacidad de asimilarlos.
Esto no significa que cualquier cambio derive en una depresión en el niño, pero puede complicarse si se trata de situaciones muy extremas o en las que no se atiende adecuadamente la necesidad del niño.
En el caso de los adolescentes, estos estados depresivos aparecen con más frecuencia, al experimentar no sólo unos cambios importantes a nivel físico, sino también a nivel social, familiar, ideológico, etc.
La depresión en los primeros años de la vida suele parecerse más a problemas de conducta, con importantes enfados, discusiones o rabietas. También se traduce en falta de motivación general hacia cualquier actividad, lúdica o no, que se les proponga.
¿En qué consiste la terapia psicológica para la depresión en niños y adolescentes?
Se trata de que el niño o el adolescente pueda conectar con aquello que le está haciendo sufrir para, posteriormente, elaborar los sentimientos de tristeza que le produce. De esta forma se irá reduciendo su sufrimiento, y esto abrirá el camino para que encuentre nuevas vías de satisfacción que le permitan volver a disfrutar de actividades propias de su edad.